IM CLINIC te ofrece un abordaje multidisciplinar y personalizado para el tratamiento del lipedema de brazos, que incluye servicios de tratamiento nutricional, fisioterapia, aparatología avanzada, seguimiento hormonal, acompañamiento emocional, tratamientos conservadores y lipoescultura asistida por vibración (PAL).
Alimentación
Aunque un cambio en la dieta no puede curar el lipedema de brazos, sí que puede contribuir a reducir la inflamación y mejorar los síntomas. Por eso, es probable que los especialistas del área nutricional de IM CLINIC te recomienden llevar una dieta antiinflamatoria rica en frutas, verduras, proteínas magras, y grasas saludables, eliminando los alimentos procesados, azúcares refinados y grasas saturadas que puedan empeorar la inflamación y el dolor.
Fisioterapia
Es un elemento clave para tratar el lipedema de brazos, ya que puede ayudar a mejorar la movilidad, reducir el dolor y frenar el avance de la enfermedad. ¿Cómo? Mediante técnicas de drenaje linfático manual, masajes terapéuticos y ejercicios para mejorar la circulación y la fuerza muscular que resultan muy efectivos. Además, la fisioterapia puede ayudar a aliviar esa sensación de pesadez y a reducir la hinchazón en los brazos.
Tratamientos conservadores
Son tratamientos que se centran en mejorar la calidad de vida sin recurrir a la intervención quirúrgica, como son la terapia de compresión para reducir la hinchazón y el dolor, y la hidroterapia, que utiliza el agua para mejorar la circulación y reducir la inflamación. Además, el equipo médico puede recurrir a la administración de medicamentos antiinflamatorios y analgésicos para controlar los síntomas, que puede ser muy efectivo para el tratamiento a largo plazo del lipedema.
Cirugía para el lipedema de brazos
La cirugía es una opción que suele considerarse cuando las medidas conservadoras no funcionan con el lipedema de brazos. Una de las intervenciones más frecuentes es la liposucción o lipoescultura PAL, que implica una aspiración suave de la gasa mediante cánulas delgadas, que se lleva a cabo con incisiones pequeñas en puntos estratégicos y poco visibles. Esta operación de lipedema ayuda, no solo, a disminuir el volumen en los brazos, sino a mejorar la calidad de vida.
El tiempo de intervención oscila entre 4-8 horas, siendo necesario el ingreso durante 1-2 noches y la utilización de anestesia general. La recuperación lleva en torno a dos semanas en las que suele recomendarse el drenaje linfático y la utilización de medias de compresión para mejorar la inflamación postquirúrgica. El reposo será esencial en los primeros días, tras los cuales es posible que se te recomiende caminar. Tras unas 3-4 semanas, podrás hacer vida normal.
El postoperatorio dependerá de cada paciente, de la gravedad del lipedema y la cantidad de grasa que se deba extraer, aumentando las molestias y el tiempo de la intervención, cuanto mayor es dicha acumulación. Eso sí, los resultados son inmediatos tras la operación y la paciente suele apreciar esa disminución de volumen y una gran mejoría en los síntomas. Dependiendo del caso, a veces pueden ser necesarias varias intervenciones o una para retirar el exceso de piel resultante de la eliminación del lipedema en los brazos.
En IM CLINIC contamos con un equipo multidisciplinar especializado, liderado por el doctor Sebastián Rosell, cirujano plástico experto en lipedema, que te proporcionará una total confianza a la hora de diagnosticar y tratar tu lipedema de brazos.