Llega el verano, el buen tiempo y la ropa ligera. Y muchos empezamos a plantearnos como vamos a lucir ombligo. Pues uno de los lugares donde más grasa se acumula, especialmente si llevamos una vida sedentaria y hemos pasado de los 40, es en el abdomen. Y esto pasa tanto a hombres como mujeres. El temido “flotador” o la “barriguita” abultada hay que combatirlas antes de que se instalen definitivamente en nuestro contorno corporal. Por eso aquí van 10 consejos prácticos para conseguir un vientre plano.

1. Come alimentos ricos en fibra

Añadir a tu alimentación productos ricos en fibra, te ayudará a mejorar el funcionamiento del estómago, mejorar la digestión y prevenir el estreñimiento. También, te ayudará con los gases y la retención de líquidos, reduciendo la sensación de hinchazón. Mantendrás la flora bacteriana saludable y te ayudará a evitar la absorción de grasas a nivel abdominal. Aunque, no debes abusar de su consumo y se recomienda no superar los 30 g de fibra al día.

2. Evita refrescos y bebidas azucaradas

Se recomienda evitar el consumo de bebidas azucaradas o refrescos, especialmente los que tienen gas. Este tipo de bebidas contienen altos niveles de azúcares y grasas que contribuyen a su acumulación en el cuerpo. Además, que son productos con un exceso de gas que nos producirán malas digestiones y nos hincharan. Da igual que sea light, cero o diet; substitúyelo por agua en las comidas.

3. Evita las frituras

Ingerir productos rebozados implica un aumento de la ingesta de grasas saturadas que afectan directamente a los niveles de tu colesterol LDL. Se recomienda cocinar los alimentos a la plancha, al vapor o cocidos.

4. Jengibre

El jengibre es tu nuevo aliado en guisos, sopas, zumos vegetales… Es una de las especias más saludables, por su cantidad de nutrientes y sus componentes beneficiosos para el cuerpo y mente. El jengibre estimula la producción de ácido del estómago y los jugos digestivos. Con ello, mejora la digestión evitando la hinchazón, estreñimiento o digestiones pesadas. Además, también tiene propiedades quemagrasas, saciantes y diuréticas.

5. Mastica bien los alimentos

Solemos olvidar que una buena digestión empieza por la boca. Para ello, deberemos masticar bien todos lo que comemos y, evitar engullir y comer con prisas. Comer despacio, con calma, nos ayudará a reducir la ingesta de aire y a aumentar la sensación de saciedad.

6. Come 6 veces al día

¿Es mejor comer más veces pero menos cantidad? O, ¿más cantidad menos veces? Se recomienda no dejar pasar más de tres horas entre ingestas para así evitar el picoteo poco saludable y, además, reducir la cantidad que ingieres al no sentirte tan hambriento/a. Comer seis veces al día te ayudará a mantener los niveles de insulina, a que tu cuerpo no almacene la grasa (y, por tanto, la puedas eliminar más fácilmente) y, tu metabolismo estará más activo. ¿Necesitas que planifiquen por ti cuándo y qué comer? Nuestra nutricionista puede ayudarte a organizar tu alimentación y conseguir unos buenos hábitos alimentarios para mejorar tu salud y tu figura. Pide una cita en nuestros centros.

7. Bebe mucha agua

Elige beber agua sobre cualquier bebida calórica y, escoge también, alimentos ricos en agua. Es una opción saludable que te ayudará a reducir la ingesta de calorías. Pero, también, eliminar toxinas de tu organismo, a mantenerte hidratado y te darán la sensación de estar lleno o saciado. Se recomienda beber unos 2 litros de agua al día.

8. Coles, pocas

Las verduras y frutas son alimentos imprescindibles en cualquier dieta para perder peso. Aunque, debemos diferenciar aquellas que son adecuadas para obtener un vientre plano y, las que no. Todas aquellas verduras que contengan un alto nivel de sulfuros, como son las coles, el brécol, la coliflor, la coles de Bruselas, el brócoli etc., contienen fibras insolubles que provocan flatulencias e hinchazón. Por tanto, se recomienda evitar o reducir su ingesta.

9. Caminar, nadar, bailar

¿Eres de los que piensa que tan solo se quema calorías haciendo ejercicios de cardio en el gimnasio? Hacer 30 minutos de cualquier actividad (por ejemplo, caminar, bailar, nadar) puede ayudar a tener un vientre plano, reducir cintura y prevenir enfermedades cardíacas. Caminar, bailar y nadar son tres de los ejercicios más recomendados para mantener una cintura bien definida.

10. Medicina y cirugía estética cuando nada funciona

Cuando nada funciona y tu abdomen sigue abultado de una manera muy evidente, quizás sea el momento de acudir a un especialista para conseguir el vientre plano que deseas. Existen diferentes tipos d tratamientos que ayudan a eliminar la grasa en zonas concretas. Un ejemplo es la maderoterapia corporal, un masaje tradicional que se realiza con instrumentos de madera adaptados a la anatomía del cuerpo. Este tipo de tratamientos es muy ventajoso para reducir la grasa localizada, reducir la retención de líquidos y aliviar dolores musculares. Otros tratamientos también recomendados son el Morpheus, el cual consiste en pasar sobre la piel el cabezal de Morpheus en la zona a tratar. Sus microagujas trabajan a nivel dérmico para eliminar grasa, reducir celulitis y tratar la flacidez y arrugas.

Si ya lo has probado todo y, aún así tu vientre sigue abultado y almacenando grasa, la tecnología y la cirugía estética pueden ser una solución más definitiva: lipoescultura 4D, abdominoplastia HD, marcación abdominal o el Body Tite son algunos de las cirugías que pueden ayudarte y que te explicamos en este post.