La sonrisa gingival se refiere a la exposición excesiva de encía al sonreír. Aunque no afecta la funcionalidad de la boca ni la salud dental, puede influir en cómo percibimos nuestra sonrisa. Lo que puede llevar a cierta incomodidad o incluso complejos a la hora de sonreír.
Por lo general, una sonrisa se considera gingival cuando las encías visibles superan los 2 o 3 milímetros al sonreír. Esto puede variar según la percepción personal y los estándares estéticos de cada individuo. En cualquier caso, es importante recordar que todas las sonrisas son únicas, y solo debemos acudir a un especialista para corregir la sonrisa gingival, también llamada sonrisa alta, cuando nos produce una incomodidad real, que afecte nuestra autoestima o la seguridad en nosotros mismos.